ARRIBA LOS GORDOS

 

No, no es discriminación ni apología. Solo celebro la aparición del señuelo Fatty, un nuevo modelo de Gozio en línea con aquel Fatty Crank de Tech que realmente me dio muy buenos resultados.

Un día estábamos haciendo una nota con Marcos Borgatti en Monje, Santa Fe. Veíamos mucho movimiento de tarariras e, incluso, las asustábamos con nuestros señuelos, pero ni un pique. Como el ámbito era limpio, puse el Fatty Crank y empezaron a picar, pero todas. Marcos tenía otro artificial igual en su bolso así que fue un festival de ataques y capturas.

Un tiempo después, viajé a Gualeguay a hacer otra nota. Una pequeña laguna donde no encontrábamos cómo lograr que se interesaran por todo lo que le tirábamos. Luego de un par de horas consideré que era tiempo del mismo Fatty. Acá no sería tan fácil, porque había duraznillos y otras plantas, pero valía la pena probar.

Cuando logré que pasara sin trabarse entre dos tallos, una buena tarucha se lo tragó entero. ¿Casualidad? Repetí tiros parecidos y toda vez que trabajó un par de metros era nuevamente “víctima”.

Por eso me pone contento volver a guardar dos o tres Fatty en mi caja de pesca. Pronto los estaré usando, porque ya mis amigos pescaron muy bien con ellos en una temporada difícil, donde saber qué señuelo emplear va a ser aún más determinante de lo habitual, por el poco margen de error que causa el bajo stock de taruchas.